Que nos gustan los códices no es ningún secreto. Además de ser auténticas joyas, obras de arte, nos trasladan muy lejos, a otra época, a menudo tomada como ejemplo de inmovilismo, aunque en realidad sirvió de impulso para el nacimiento de la Edad Moderna en aspectos sociales, económicos y artísticos, como ya os contamos en Ars Millenii, Mil Años de Arte Miniado.
Sus habitantes dicen que Colonia, Köln, es la ciudad más mediterránea de Alemania. Y nosotros, que estuvimos en Navidad tenemos que reconocer que nos sorprendió su ambiente, y la simpatía de sus habitantes. Reúne un gran número de museos, y una serie de iglesias románicas que son un espectáculo. Sorprendente porque no estamos acostumbrados a ver construcciones de esa época con un tamaño como el que aquí nos encontramos, desmontándo el tópico de la iglesia pequeña y oscura. Y por supuesto, la Catedral, que milagrosamente sobrevivió casi intacta (al contrario que la ciudad) a los bombardeos sufridos durante la segunda Guerra Mundial. Nuestra experiencia en esta ciudad alemana se transformó, como os contamos en nuestro post Colonia, una Ciudad con Vistas, en un libro español-inglés, que ya estamos pensando actualizar y añadir la versión en alemán. Una lectura que nos lleva lejos en el tiempo; un viaje a finales del s.XVIII, a un lugar cercano, y a un tiempo, desconocido: Portugal. Los principales hechos de esa época en el país vecino, sirven de marco para contar la historia de la construcción del Palacio de Mafra. Saramago realiza un gran ejercicio de documentación y también de ambientación, para convertir su novela en un estudio de usos y costumbres, que deriva hacia su verdadero punto de interés, la personalidad humana. Os contamos más en nuestra entrada Memorial del Convento |
AuthorRoberto & Maribel Categories
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December 2012
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